martes, 20 de noviembre de 2007

Uniformes Desnudos

A Linda
que en su bello rostro
encontré los
bellos momentos

The loneliness rains on my words
The winds of cry hits my window
You are here / answer me every scream
Some time I was shadow in your eyes?
Your breathe ever was caress in my cheeks

I don't come to ask for sorry today
I want to sit next to you
Feel the flames of hell in one kiss
Let fall the disguise of your legs
My queen of desire

Your kisses be prolong like a space that burns
Like a heart that locks up to the death
I don't want to live in blazes of fantasy
We burst to fairy tales
Although the loneliness wets our vivid peel

Your arms of pearl
Appears between my hands
Abandoned
A sea be closed between our lips
Like a desire more tight and eager

Always I hold you in my unfortuned yearning
Keep our love in the pale heaven
Feel like the warm filled
That past of horror

For this I only remember
Our bodies intertiwed in the time
Because with you running away the cries
Conquering that love as sublimes winners
With necessary breaking off / in naked uniforms

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hoy me siento tan vacía, tan opaca está mi alma, hoy vuelvo a escribir con el corazón agitado, comprimido por el dolor ¿Dónde quedó el armazón de hielo? Aquel que se elaboró cuando me dijiste adiós, las penas amargas hacen un nudo en mi garganta, estoy tan triste, tan falta de ‘algo’ que jamás nadie me lo podrá dar.
Cuándo diablos terminaremos esta historia, o será que mi karma es sufrir por siempre…
La ilusión que nació algún día se pierde en el viento, se va con las hojas secas que caen de un árbol viejo…
Soñaba con bailar esa canción tomada de tu cuello, sí aquella que va sonando, quería que tomes mi mano, la aprietes y no la sueltes jamás, pero hay diferencias desde aquel día que te conocí…
Miedos, malditos miedos… ¿cuándo se irán?... Llantos, risas, palabras sin aroma del amor, abrazos por cumplido, no hieras mi alma te pedí… Ahora solo me quiero ir… Viajar a ese mundo de ilusiones y risas sinceras quisiera llegar…
Estira tu brazo y dame una mano, ayúdame… ¿A quién le hablo? – me pregunto-
No hay nadie-responde el eco de mi alma-